En la librería el ambiente era fascinante. El lugar, que ahora es una librería, antes era un Teatro.
Ni bien entrás, te asombrás. Uno piensa que va a ir a una librería, pero el lugar está lleno de lectores. Y es un lugar para ir a leer libros. ¿Habrá gente que se queda todo el día leyendo?- me pregunté.
Cuando entramos, nos fuimos directamente al sector niños. Uno piensa ¿qué hace un adolescente en un lugar así? Pero nos encontramos con libros muy interesantes para mí. Me encantó ese lugar, tiene libros que a mí me interesan. Valeria nos leyó poesías pero eligió los libros por las ilustraciones. Eran libros para ver y entender lo que leíamos. Fue un salida muy interesante y me gustaría volver con mis compañeros de curso para que se interesaran más en los libros.
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